Tantos cambios -y los que se avecinan, ya que esto se publica en la tercera semana de invasión de Rusia a Ucrania- nos obligan a adaptarnos o renunciar a un futuro.
Empeñarse en seguir haciendo lo de siempre cuando ese “siempre” ya no es exactamente lo que era es muy arriesgado. Por eso, los australianos de Think Big comparten una serie de recomendaciones que nos ayudarán a repensar nuestro negocio para crecer.
Una cosa más: al comienzo de su artículo quieren dejar claro un concepto: no es lo mismo darle demasiadas vueltas que repensar.
Vayamos a ello.
- Repensar tu modelo de negocio: es el que se refiere a cómo ganas dinero, cómo y por qué facturas a tus clientes, qué les das a cambio.
- Repensar tu política de precios. Lo fácil es subir los precios pero ¿es lo mejor? Piensa en cómo facturas: por unidad, por tiempo, por paquetes de productos o servicios, por proyectos, … ¿Estás ofreciendo lo que el cliente quiere?
- Repensar tu nicho de mercado. ¿Es suficientemente específico como para que una potente campaña de marketing sea eficaz? ¿Es lo bastante grande como para poder crecer?
- Repensar para mejorar tu negocio. Es para hacerlo más eficiente, o para revisar sus proceso internos, por ejemplo.
- Repensar tu marketing. ¿Cómo estás dando a conocer tu negocio? ¿Cómo pueden saber de ti tus futuros clientes? ¿Qué canales/acciones te funcionan y cuáles no?
- Repiensa lo que tus clientes opinan y necesitan. Sus gustos y preferencias evolucionan, sus necesidades puede que ya no sean las mismas que antes. Actualiza tu conocimiento sobre ellos.
- Repensar para innovar. Precisamente por tanto cambio hay que explorar nuevas posibilidades. Nuevos productos, diferentes servicios, otras formas de ofrecerlos… en una palabra, innovar. Ir por delante. Probar. Ver lo que pasa y corregir.
¿A que no pensabas que hay tantas formas de repensar tu empresa o actividad profesional? Pues sí. Hay unas cuantas: aquí puedes ver otros secretos para hacer crecer tu negocio rápidamente.
¿Por cuál vas a empezar hoy?
Imagen: la del artículo original
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IDEA CLAVE
Si quieres que tu negocio tenga futuro es imprescindible que, de vez en cuando, revises cómo funciona. Quiénes son ahora tus clientes. Por qué te compran. Qué hacen tus competidores,
Un negocio con futuro tiene 3 partes: la que funciona, la que no funciona y la que podrúa funcionar. De todas las cosas que haces, ¿cuáles están en qué parte?
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