Tan importante como pararse a repensar el negocio o empresa de una forma general, lo es hacerlo pensando específicamente en su modelo de negocio. Es decir. en la forma en la que gana el dinero. Así que presentamos este útil artículo original de Kim Lindros publicado en el blog de Century Link.
¿Es hora de repensar tu modelo de negocio?
En perspectiva, tu modelo de negocio describe el tipo de negocio que operas. Incluye cómo y dónde se opera, su base de clientes objetivo y cómo genera ingresos. También describe cómo tu organización aporta valor a los clientes para continuar generando ingresos y administrar un negocio de éxito.
Si tu pequeña empresa ha obtenido ganancias constantes durante años sin expandirse ni realizar cambios radicales, y estás razonablemente seguro de que puedes seguir haciéndolo, ¡excelente!
Pero si los hábitos de tus clientes están cambiando o si aparecen nuevos competidores, puede que sea el momento de reconsiderar tu modelo de negocio para asegurarte de que sigue siendo la empresa que puede satisfacer las necesidades de tus clientes.
RAZONES PARA REPENSAR TU MODELO DE NEGOCIO
A medida que una empresa crece y evoluciona, es posible que su modelo de negocio también deba cambiar. He aquí algunos indicadores de que tal vez desees orientar tu empresa en una nueva dirección:
- Pierde dinero. Muchas empresas suelen tener altibajos. Si tus ingresos disminuyen mes tras mes sin una razón obvia, como cambios estacionales, cierres por pandemias o una recesión económica, analiza detenidamente el motivo. ¿Sus precios son demasiado altos? ¿O sus costes? Si no puedes identificar la razón, puede que haya llegado el momento de replantearte el modelo de negocio.
- Su base de clientes está disminuyendo. Muchos empresarios se preocupan cuando ven que disminuye el número de clientes habituales y tienen dificultades para atraer a nuevos. A veces, puedes solucionar este problema con una publicidad más eficaz o una mayor presencia en Internet. Pero si lo has intentado y sigues sin notar ninguna mejora, puede que haya llegado el momento de replantearte las cosas.
- Tiene demasiados competidores que ofrecen el mismo producto o servicio. Tener una ventaja competitiva es de vital importancia para las pequeñas empresas, especialmente cuando hay muchas empresas similares en una zona. La saturación del mercado se produce cuando determinados productos o servicios dejan de tener demanda en un mercado concreto, lo que puede deberse al aumento de la competencia. Una vez que un mercado está saturado, hay pocas oportunidades o crecimiento, a menos que encuentres nuevas formas de diferenciarte o replantees tu modelo de negocio.
- El mercado o la demanda de los clientes ha cambiado, pero tu empresa no. Para un empresario es fundamental saber qué les importa a los clientes. Una empresa puede quedarse obsoleta rápidamente si no comprende las necesidades cambiantes de los clientes. La digitalización es un área que ha tenido un gran impacto en todo tipo de organizaciones. Los avances tecnológicos han transformado la forma en que los clientes quieren interactuar con las empresas y cómo se gestionan los negocios. Es posible que tengas que cambiar tu modelo de negocio para interactuar online con tus clientes.
TIPOS DE MODELO DE NEGOCIO
Si te estás replanteando tu modelo de negocio, ten en cuenta que hay muchos que investigar.
A grandes rasgos, los tipos más comunes de modelos de negocio son empresa a empresa (B2B), empresa a consumidor (B2C) y empresa a gobierno (B2G). Debajo de estos modelos generales hay otros más detallados que se centran en cómo funciona y genera dinero una empresa. Algunos ejemplos son: Ladrillos y clics, Suscripción, Publicidad y Alquiler.
Modelo de ladrillos y clicks: combina una presencia offline (como un establecimiento físico) y una presencia online o digital. Normalmente, un cliente puede comprar un producto en la tienda física o pedirlo por Internet y que se lo envíen a la tienda para recogerlo o se lo entreguen a domicilio. Pero hay muchas combinaciones de “ladrillos y clics”. Un negocio de catering podría abrir un sitio de comercio electrónico para vender salsas, o una pizzería podría tomar pedidos por teléfono, a través de la web, por texto o por clientes diciendo “Alexa, pide pizza”.
Modelo de suscripción: ofrece un producto o servicio de forma regular a cambio de una cuota mensual. Lo hemos visto antes con los servicios de streaming, pero también puede aplicarse a las pequeñas empresas. Por ejemplo, un productor de carne ecológica entrega a los consumidores una caja de filetes, chuletas y salchichas seleccionadas cada mes o dos veces al mes por un precio fijo recurrente. Un taller mecánico de automóviles equilibra su flujo de caja ofreciendo mantenimiento periódico por una tarifa recurrente asequible, además de reparaciones puntuales.
Modelo publicitario: Un modelo de negocio muy popular hoy en día es la publicidad: una empresa crea contenidos que se comparten en Internet y obtiene ingresos de los anuncios. YouTube es un buen ejemplo. Todo tipo de empresas pueden crear vídeos de instrucciones y otros vídeos informativos. Los anuncios que se colocan en esos vídeos pueden convertirse en una fuente pasiva de ingresos. Una empresa de software puede crear un boletín electrónico con contenidos específicos para su sector. Si otras empresas deciden patrocinar el boletín de tu empresa, puedes recaudar los ingresos por publicidad. O digamos que el propietario de un restaurante y chef decide crear contenido digital online, incluyendo recetas, vídeos y libros electrónicos. Con el tiempo, podrían aprovechar las asociaciones de influencers con marcas.
Modelo de alquiler o leasing: una empresa compra un producto que luego alquila a otras empresas o consumidores. El alquiler de ordenadores y fotocopiadoras es habitual, pero este modelo podría extenderse a todo tipo de pequeñas empresas. Por ejemplo, una joyería podría alquilar relojes de gran valor y collares únicos.
COMBINAR MODELOS DE NEGOCIO
Tu negocio puede tener necesidades únicas que requieran una solución a medida. Al replantearte tu modelo de negocio, puedes hacerlo tuyo. En lugar de cambiar por completo tu modelo de negocio, puedes diversificarlo o adaptar modelos de ingresos extra. Por ejemplo, una ferretería local puede seguir vendiendo suministros para mejoras del hogar y añadir al mismo tiempo un modelo de arrendamiento. Esencialmente, ese negocio puede utilizar modelos de ladrillos y clicks y de alquiler a la vez.
REVISAR EL MODELO DE NEGOCIO CON REGULARIDAD
Para garantizar la viabilidad a largo plazo de tu empresa, revisa su modelo de negocio al menos una vez al año. Haz algunos análisis para conocer las tendencias del mercado y la demanda de los clientes. Determina si tu base de clientes y tu público objetivo están en sintonía, sus necesidades y deseos, y cómo podrías satisfacer mejor lo que buscan. A continuación, planifica la revisión del modelo en consecuencia.
En general, las empresas desean crecer por muchas de las mismas razones. Quieren más beneficios para aprovechar las oportunidades que surjan, expandirse cuando sea necesario y capear las caídas del mercado sin afectar a clientes o proveedores. Replantearte tu modelo de negocio puede ser un paso lógico.
AUTORA
Kim Lindros. Es consultora de estrategia y escritora.
IMAGEN: StockSnap en Pixabay
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IDEA CLAVE
Con tanta crisis y cambios, cada día se ve más la creciente importancia de un buen modelo de negocio para el éxito de la empresa.
¿Tienes claro cómo es el tuyo? ¿Has pensado ya en cómo mejorarlo o complementarlo? ¿O quizá cambiarlo del todo?
Pues ya estás tardando… 😉
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